La historia del fútbol femenino en Chile a nivel de selección se inicia en la década de los ochenta, cuando grupos de mujeres comienzan a practicar el deporte de forma recreativa, organizando clubes y torneos de verano. Aunque ya en la década de los 50, clubes como Las Dinamitas y Las Atómicas, ambos de Santiago, se erigían como los primeros clubes de fútbol femenino del país, y en la década de los 70, Colo-Colo comenzaba a desarrollar una rama femenina de fútbol, fue a inicios de los 80 donde la Asociación Central de Fútbol de Chile manifestó la posibilidad de crear una liga femenina de fútbol a nivel nacional.
Mientras, en 1988, se organizaba la Copa Femenina de Invitación en Mendoza, Argentina, como antesala de ensayo para lo que sería la primera Copa Mundial Femenina de Fútbol de 1991 a realizarse en China, por lo que la Conmebolnecesitaba asegurar su presentación. Fue así que la Asociación Nacional de Fútbol Amateur organizó campeonatos, tanto en la Región Metropolitana como en las principales ciudades chilenas. A partir de estos torneos surge la base de la selección nacional y la competencia federada.4
En 1991, la Federación Internacional de Fútbol Asociado FIFA incorpora la expresión femenina en forma competitiva y oficial al establecer la primera Copa Mundial Femenina, que se realizaría en China. En Chile, la Asociación Central de Fútbol designa al ex jugador Bernardo Bello como director técnico de la primera selección nacional para las eliminatorias sudamericanas a dicho torneo, a realizarse en Brasil.
Como no existía ningún campeonato femenino unificado de Primera División, el entrenador debió utilizar diferentes recursos para captar a las jugadoras. Entre ellos, las pruebas masivas de jugadoras en el Complejo Deportivo Quilín, mensajes a través de los diarios de ese tiempo, y la búsqueda de datos de potenciales seleccionadas con otros técnicos en diferentes partes del país. A partir de febrero de ese año, según estimaciones del cuerpo técnico de la época, se probaron en total unas 400 mujeres, una cifra que obligó a realizar varios cortes antes de llegar al plantel definitivo de 18 jugadoras que viajaría a Brasil.5
El periodista Rodrigo Retamal (de La Tercera) publicó en 2018 el libro La batalla de las pioneras, en el que explora precisamente el nacimiento de la primera selección nacional femenina que disputó las clasificatorias para el primer mundial de fútbol femenino en 1991.
La selección femenina de fútbol de Chile es el equipo representativo de dicho país en las competiciones oficiales de fútbol femenino. Su organización está a cargo de la Federación de Fútbol de Chile (FFCh), la cual es miembro de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y de la FIFA.
A nivel absoluto, clasificó a su primera Copa Mundial Femenina de Fútbol de 2019 y para el repechaje de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 luego de la Copa América Femenina 2018.1 En la región, las Chicas de Rojo han participado en todas las ediciones de la Copa América Femenina,2 en la cual han obtenido dos subcampeonatos en 1991 y 2018, en donde clasificaron por primera vez a una Copa del Mundo, la Copa Mundial Femenina de Fútbol de 2019 en Francia. Además disputaran el repechaje a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
A nivel juvenil, la selección sub-20 ha participado en una Copa Mundial, en 2008, cuando fue el anfitrión y logró el 14.º lugar, y la selección sub-17, en una Copa Mundial, en 2010, cuando obtuvo el 15.º lugar. La selección sub-15 ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud en 2010, el primer título internacional oficial de una selección chilena de fútbol.
En el año histórico para la selección chilena femenina y la mejor representante nacional de las voces más autorizadas para hacer evaluaciones.
“Hubo muchos cambios en el último tiempo. Se está apoyando y apostando más por el fútbol femenino. Ahora tenemos más visibilidad: la gente conoce a las jugadoras. Muchos clubes han cambiado su mentalidad y han decidido crear más escuelas para las chicas”, valoró Christiane Endler en entrevista con la página oficial de la FIFA.
El reflejo más grande del avance del fútbol femenino en Chile fue la participación del seleccionado por primera vez en un Mundial, en Francia 2019.
“Que ganas de volver a estar ahí, de volver a vivir esa experiencia, fue increíble”, se emociona la arquera cuando ve imágenes de su participación en la máxima cita mundial.
En el plano personal reconoció estar sorprendida en el partido ante Estados Unidos por “haber perdido 3-0 y ser la mejor jugadora del partido, era algo que no me esperaba…”.
Sin embargo, se enfoca en el plano colectivo y la ambición de todas las jugadoras. “Tenemos el repechaje en abril y nos estamos preparando bien para llegar lo mejor posible a esa instancia y poder cumplir otro de nuestros sueños que es jugar unos Juegos Olímpicos. Una experiencia increíble que a todo deportista mundial le gustaría vivir”, afirmó.
CARRERA EN EL EXTRANJERO
Christiane Endler entiende que está en uno de los mejores clubes del mundo y que es una referente a nivel nacional: “Poder estar en un club tan exigente como el PSG, en el que necesitas estar siempre a tope, sino no juegas, me ha servido para llevar mi juego a otro nivel”, expresa.
“Me cuido mucho más físicamente, entreno más, al margen de las propias sesiones del club. Es importante tener ambición en el sentido de querer aprender, ser más perfeccionista, creer siempre que se puede hacer mejor… es la manera de poder seguir mejorando”, cree la mejor arquera de la historia del fútbol nacional.
Fuente: https://www.showsport.cl/2019/11/el-ano-en-la-roja-femenina-de-tiane-endler/
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